10.7.20

verano 020 plegaria



Santa Rita Indiana, dame el truco pa bestsellear una escritura todo under pero absolutamente popular. Santo Kendrick, dame un rayo de dinero con el que financiar el disco que quiero grabar con Vaca antes de que se agoten las fuerzas. San Reinaldo, dame la persistencia con la que escribir en medio del calor abrasador del madriz posconfinado como si valiera para algo. Como si fuera ese algo que en la fiebre se percibe sin agarres. Santa Dalia, dame el humor para llorar de repente y Santa Fernanda dame lo justo de depresión pa rebajar la euforia que tanto me distorsionó para llegar hasta aquí. Santa Stein y Santa Lyn, dadme el flow que abre tiempo en el tiempo de modo que el otro tiempo afuera del libro importe una mierda menos. Santa Mala, dame la rabia que ahora mismo necesito pa comer la hierba del suelo como una oveja a la espera de su momento. Actitud. Cerramiento. Santo T. Berrigan y san TS Eliot, dadme la onda del collage y el corte de verso. Juan de Yepes, vente conmigo, que necesito sitio en el poco sitio que en esta celda ha quedado. Santa Ceci Vicu, desanuda esta tensión con una de tus ligeras sabidurías. San Truman, sal de la foto de la tapa del libro que con trece años me compré en el Eroski y responde, ¿qué harías tú en este caso? Santa Rita Indiana, manda una señal o un cuento corto que ilumine esta tormenta (figurada) en la que estamos (literalmente) inmersxs. Literatura/Poesía no te mueras, yo creo en ti, los estudios culturales son tan fiables para el alma como la hidroxicloroquina para el covid-19.