27.9.15

27/28.9.15 oh

*
a las tres no traía un trozo sino una curva oscura

el resto todo luz pero muchísima       al rato    me dormí un rato sin querer

sonó y entonces estaba completamente opaca entonces cruda

era como un planeta crudo, digo un satélite crudo, sin luz, sólo tierra gris y bordes rojos

tierra gris y bordes rojos refulgientes      en vez de luz 
 
una estrella fugaz,      muy loco el tema
 
después fue deseclipsando          

era muy muy hermoso      mitad y mitad    

a la mitad me despedí                   dormí de nuevo
             

23.9.15

SIGNS

Can I trust this?

Or what the country says
by green? Miles

of avocado groves:
not monotony

but health
full rest

Rae Armantrout. Extremities.  
The Figures, 1978. 

[traducción libre /// SEÑALES / ¿Puedo confiar en esto? / ¿O qué es lo que dice el campo / con el verde? Kilómetros / de aguacatales: / que no es monotonía / sino salud / puro descanso]

Rae Armantrout mañana jueves 24 de septiembre en la Saint Louis University de Madrid (calle Amapolas) a las 18.30

16.9.15

le parody & olavarrieta & besos


me encantan las letras de Parody, siempre. Es una genia. Me gusta la ambigüedad fonética. Es sutil pero es muy bella. Como en Summer Rain - que dice "ei amor" en vez de "el amor" y le da ese toque como de amor de verano, como de amor con un guiri en málaga un verano. En Hondo Agujero dice "cavé un hondo agujero" pero como parte tanto la primera palabra es como si acentuara las dos sílabas y a mí también me suena "cabe": "ca beee un hondo agujero". Esto de que no suene exacto a lo mejor es nimio pero resulta misterioso. Es un matiz pop bien hermoso, no sé. Y qué decir de "qué a gusto, qué silencio, qué delicada alegría", la mejor descripción del placer que pueda hacerse. Y del vídeo de besos. Vídeo de besos bajo el agua y fuegos en el cielo y universo, como dice Sole, del de verdad: con estrellas y luna en vez de especulación y metafísica. Parody lo hizo. Olavarrieta lo hizo.

15.9.15

de un documental y un texto de preciado





el otro día de casualidad vi un documental muy interesante sobre "Los orígenes del SIDA". El documental reconstruye la investigación de varias personas del mundo de la medicina, la ingenieria genética, la biología, la antropología y la historia para descubrir dónde, cuándo y cómo apareció el VIH. Los investigadores principales coincidían en que una arqueología del virus podía ayudar a comprender el funcionamiento de las pandemias por venir. Es un documental producido antes de la epidemia del ébola. Lo que a mí más me sorprendió es la más que plausible vinculación de la extensión del virus con el apogeo del expolio colonial en África a comienzos del siglo XX. Según ellos, el virus saltó del chimpancé al ser humano en una zona selvática de Camerún, pero su extensión pandémica hacia el Congo se debió a las rutas de porteadores humanos esclavizados por las corporaciones coloniales. El desorden venéreo de la vida en el camino, la sífilis traída de Europa por los colonos y la gestión sanitaria que los belgas hicieron de la enfermedad del sueño con que la mosca tsé tsé infectó a sus máquinas humanas de trabajo, fueron los canales de multiplicación exponencial. Hacia los años 60 ya había casos de SIDA en el Congo no documentados como tal. Cuando la epidemia estalla entre los hombres blancos homosexuales de Estados Unidos este rastro resulta totalmente invisible, de manera que la enfermedad es leída en términos homófobos durante bastante tiempo. Precisamente es esta lectura lo que más me impresiona: que en el origen de lo que pudo ser percibido como "castigo divino" a los promiscuos que osaban cuestionar el orden moral y reproductivo del patriarcado en vez de un dios hay una corporación colonial que convierte a seres humanos en esclavos, los arranca de sus casas, los pone en camino lejos, los viola, los roba, los curan en masa sin atender a las especificidades antropológicas de la enfermedad que ella misma está generando y para cuando la enfermedad colonial capitalista toma los cuerpos de los que viven más o menos al margen de ella en la metrópoli todavía osa culparles por sus pecados. Me impresionó ver, pues, con nitidez, que los pecados son el invento de ocultación con que el dios malo comete su dominio. El VIH como una arqueología del siglo y su mal amor como una enfermedad del capitalismo. Me recordó mucho a ese texto tan importante que publicó Paul B. Preciado el año pasado en El Estado Mental, El feminismo no es un humanismo

... Las primeras máquinas de la revolución industrial no fueron ni la máquina de vapor, ni la imprenta, ni la guillotina, sino el trabajador esclavo de la plantación, la trabajadora sexual y reproductiva y el animal. Las primeras máquinas de la revolución industrial fueron máquinas vivas. El humanismo inventa otro cuerpo al que llama humano: un cuerpo soberano, blanco, heterosexual, sano, seminal. Un cuerpo estratificado y lleno de órganos, lleno de capital, cuyos gestos están cronometrados y cuyos deseos son el efecto de una tecnología necropolítica del placer. Libertad, fraternidad, igualdad. El animalismo desvela las raíces coloniales y patriarcales de los principios universales del humanismo europeo. El régimen de la esclavitud y después el del salario aparecen como el fundamento de la “libertad” de los hombres modernos; la guerra, la competencia y la rivalidad son los operadores de la fraternidad; y la expropiación y la segmentación de la vida y del conocimiento el reverso de la igualdad...