dos noches de break consecutivamente gastadas en fishtown / así que ya sabía cuando me preguntaron las canadienses dónde estaba el Johnny Brendas - no hacia Hope, sino hacia Leopard (como me había enseñado V) y es que en Phila siempre has de dirigir tus pasos por el peor camino. No teníamos entrada para el concierto de Wild Flag pero confiábamos en nuestra suerte o ganas o inconsciencia, que es lo mismo. Varias cervezas después, al ir al baño, me crucé nada más y nada menos que con dos de las mejores de lo suyo de la historia, Carrie Brownstein y Bianca Casady - mi corazón latió más fuerte, me dio pena ir a perderme un concierto tan chulo - al volver a la mesa L me dijo que acababa de encontrar dos entradas gracias a una conexión riot grrrl costa este. America provides, pensé; en la tierra de la abundancia, a veces toca. Entramos. No éramos ni cien; un salón, una barra y un balcón lleno de tíos barbudos. Las chicas en primera fila, por supuesto / y era casi el día de la mujer trabajadora. Bailamos hasta sudar y después de que el sudor rizara el pelo. No esa noche sino la siguiente (y tercera) en la misma esquina desolada que hace de fachada de ese mismo bar un tipo se ofreció a cruzarnos en su coche la ciudad para que nos ahorraramos la pasta del taxi, que no teníamos, y la aventura del bus nocturno, que iba a dejarnos en el oscuro zoo, a muchas leguas de casa y a grandes posibilidades de un asalto. Phila tiene, te digo, el corazón de oro; o es de pueblo, no lo sé, el caso es que hay gente que cuida de gente así, a ciegas. Mientras conducía el amable desconocido Ben me preguntó qué pensábamos los internacionales (sic) de los yanquis, si los odiábamos tal y como se merecían; qué te puedo decir Ben, le dije, yo estoy aprendiendo a quereros, gira a la izquierda, por aquí es ---- gracias
c & m |
4 comentarios:
El corazón me late, me conecta. No he estado en Philly pero la siento cerca por tus relatos. Gracias M.
Desde un (no) pueblo travestido en ciudad corazon (sin)oro pero con adrenalina.
Perdón, perdón, perdona, pero pero... ¿¿¿TE CRUZASTE CON BIANCA CASADY DE VERDAD O ES UN RECURSO RETÓRICO???
Ese viaje en coche espontáneo me recuerda a tantos otros por el oeste, es tan de allí, es algo tan sorprendente natural.
((la palabra que me pone tu blog para cerciorarse de que no soy spam es "nosmeto"))
no es un recurso retórico, era Bianca, sí, allí sentada en una mesa, que a mí se me acelera el pulso por cualquiera. Es que me da la sensación que ese concierto era particularmente especial y vino mucha gente de fuera de Philly. Si esto es así aquí, no me quiero imaginar cómo sera el Oeste o el Suroeste (eh, Miss V...) Por algo llaman a este sitio America, así de épico e imperial. Abrazos,
m
pd. Programé mi antispam para que intimidara a las visitas, se ve que da resultado.
quise decir "a mí no se me acelera el pulso..." se entiende
Publicar un comentario