28.2.11

a base de bien


y llovió, después de todos los climas, el último en venir fue el de la lluvia. El agua dejó el suelo lavado para resonar los pasos y todo - hasta el frío - quedó en calma. Hablé del tiempo porque es agradable hablar del tiempo en-vez-del resto y porque es sencillo de describir. El tiempo es de lo poco que siempre existe fuera de la cabeza, mojándola o dando en su cara mucho con el sol; así que en los tiempos introspectivos, hablar del tiempo permite desabrochar las ideas - también sirve para romper a hablar en las cartas y en las charlas, es muy útil. Las clases y lecturas intensivas de por aquí hacen un bucle autorreflexivo bastante denso y al final pasamos 24h/7días a la semana metidos en poemas y poéticas, poesía non stop, hasta el punto en que hemos llegado a hacer una sesión sobre la propia forma que plantea el seminario de Charles Bernstein - una forma conversacional que trata de activar la participación y la lectura de todxs y cada unx de lxs asistentes. Una franca apuesta anti-jerárquica que de verdad funciona y pone en funcionamiento - por lo menos a mí ha conseguido desplazarme hacia lugares distintos, inesperados, más finos, creo; todo un viaje este, interior y lento hasta que se verbalice, cuyas aventuras tienen lugar en salas perdidas de la biblioteca donde se lee a witt. o a watt; y en una casita de madera del siglo xix donde de repente aparece Marjorie Perloff (que es como los beatles de las cuestiones de vanguardia) en plan sitcom para decir “vengo a hablar un rato de wittgenstein, que luego tengo una cena; ay, dónde he dejado mi bolso”. Es la primera vez que la importancia pública (enorme) de un profesor no me aterra ni da reparo, sino que me resulta propicia y estimulante como interlocución; creo que desde mi estancia en la UBA y el curso de Poesía anfibia... de la UAM, nada me había roto tanto y tan bien los esquemas. En la posibilidad de esa conversación abierta y horizontal entre militantes, visitantes y estudiantes de poesía contemporánea, veo yo el lujo de este campus tan pijo - no me importa lo demás: ni su helicóptero ni su policía privada ni sus doce ordenadores por metro cuadrado

pero no digo que siempre vaya a funcionar la forma de seminario en vez de la clase magistral - dependerá de las habilidades del profesor - de su consideración sobre la inteligencia de sus alumnxs y de la suya propia (en igualdad, en superioridad, en geometría variable) - de su mayor o menor deseo de construir según qué cosas (diálogo, prestigio, comunidad, canon, tesoro, preguntas) - de sus recursos verbales - de su objeto y sujeto y perspectiva - de su experiencia - de su sensibilidad y de su responsabilidad // la manera de charles, según él, es “un método, una aproximación, una sensibilidad estética, que tomas como montar en bicicleta, no un contenido transferible” // en esto de enseñar creo que también es un maestro práctico // por otro lado es alguien que escucha tan bien que está un segundo adelantado a su tiempo; así que es capaz de anticipar lo que piensas y eso, claro, le da un segundo de ventaja y de velocidad - a veces ya se ha ido de donde tú estás, lentamente, llegando // imagino que la hiperproductividad yanqui tiene que ver con esto de no detener jamás la reflexión para que respire o sonría // se aprende mucho por aquí, a base de bien

23.2.11

informe meteorológico 3

después del viento regresó el frío. Esta mañana amaneció nevado pero no sé cómo porque anoche no nevó. Anoche hacía neblina densa y un sonido sólido a punto de estallar. Debió de reventar. Como el insomnio, así-va-a-nevar, hasta que rompe y ya es de día. En una de estas, hace una o varias noches, leí un librazo de una clásica de por aquí: Rosmarie Waldrop, The reproduction of profiles (1984) -  "Creí que moriría si mi nombre no me tocaba, o sólo con su extremo, dejando el interior abierto para tantos que sienten como propicia la lluvia al diluviar desde las nubes"
 

20.2.11

informe meteorológico 2



cuando se pasó el calor llegó el viento, un viento fortísimo, para barrerlo todo. Mientras duró el calor la gente se sentó fuera de los locales - y en la hierba jugó al frisby. Recuerdo que en la gran explanada de Central Park ocurría lo mismo con el buen tiempo: la gente se quedaba ligera de ropa y se lanzaba cosas (pelotas de rugby, frisbys), juego que me parece tontísimo por no decir que no me parece un juego. Salí la noche del viernes por dive bars - bares de buceo- de phila - garitos con barras larguísimas donde gente feúcha de mediana edad bebe cerveza barata y tragos de whiskey. Barras en U. Billares. No había djs, había jukeboxes que no dejaban casi nunca de sonar. Daba gusto elegir canciones del repertorio clásico - temazos populistas y entrañables: I want you; ziggy stardust; this charming man; etc; y la gran lauryn hill - ¿qué pasa? - la cassette que más gasté (vete a saber por qué) en 98 o 99



18.2.11

informe meteorológico




hoy no sólo hizo sol en philadelphia - también hizo calor, se podía pasear con el abrigo abierto, sin guantes y sin gorro. He visto a la gente por la calle descubierta por primera vez, más contenta. La verdadera diferencia de hoy no era la temperatura, sino la brisa - corría el aire ese en el que flota algo distinto, un anuncio. Tanta exuberancia descolocó un poco algunos de mis objetos interiores, sus marcos, los recuerdos, el humor - el melodrama. Hay gran cantidad de melodrama en mí; yo entreno para no dejarla florecer, pero a veces me es imposible no sentir así, extremas sensaciones de frases grandilocuentes - desproporcionadas; el reino injusto de las palabras que podrían haber desembocado en huracán de haber sido posible  pronunciarlas - como nombres. Para bien o para mal, en esta parte de eeuu la forma de los objetos casi nunca alcanza un estado de solidez capaz de contacto  ni de melancolía / cuando entras en un baño la luz se enciende automáticamente, el grifo reconoce debajo de sí tus manos, y el retrete calcula cuándo has dejado el puesto libre para tirar de su cadena - es una asepsia que evita, creo yo, desbordamientos - de lavabo y de persona


14.2.11

dos poetas de eeuu / infinitas formas de escritura (un telegrama)

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a Rodrigo Toscano lo conocí en 09 en ny. Leí el complejo Platform, una especie de conversación interruptora e interrumpida; busqué y sigo buscando como puedo su maravillosa plaquette Exilio-Globo-Ejército (a grito). Investiga formas de escritura y formas escénicas de poesía - lo que él llama Collapsible Poetics Theater. De memoria cito esto que tal vez escribió: la escena es el antiguo lugar de los poetas  StOp  he conocido aquí a Danny Snelson, poeta y archivero porque trabaja en subir documentos, textos y recursos de poesía contemporánea a la biblioteca de internet. Hace ediciones de ubuweb como ésta tan fantástica: http://www.ubu.com/ubu/index.html; reimprime, escanea, copia, distribuye, edita libros en discos duros por encargo y azar: cada uno resulta particular e inmenso;  también colabora con el gran archivo de poesía que es Pennsound El otro día nos presentó un ejercicio de "traducción" llamado My dear countess - consiste en la reconstrucción de un texto de Jarry a partir de un lexicon compuesto de otras obras de vanguardia  StOp Sigo por aquí, fecuentemente overwhelmed ante tanta y tanta forma de poesía



13.2.11

north of invention / algunos poetas canadienses fantásticos



el jueves 20 y el viernes 21 de enero asistí en la Kelly Writes House a un festivalazo de poesía canadiense. Dos días de 10 am a 10 pm /  48 horas de poesía nonstop / por el día lxs poetas presentaban sus poéticas / por la noche recitaban. Las conversaciones que se dieron dentro de esa casita victoriana de 1851 resultaron bastante estimulantes - llegué a pensar, de hecho, que aquí en Norteamerica se han alejado un siglo de debates por comenzar en nuestras partes del mapa. Tres poetas imprescindibles de aquella banda canadiense / tres debates (vida, ciencia, fluidez):

Jeff Derksen: leyó unos poemas muy inteligentes y acertados, pero la presentación de poética que trajo fue como para abrazarlo largamente. El tipo está pensando, entre otras cuestiones, en formas de escritura postconceptuales pero no por posmodernistas-mal sino por conceptualizaciones de eso que lxs experimentales temen tanto: la expresión/la lírica/el sentimiento-incluso (es una forma de abreviar) Habló de un mundo en descomposición, de sus ciudades muertas, de las formas de vida resistente en el espacio (urbano) y en el lenguaje (poético) - habló brevemente de okupaciones. Aún no leí pero ya tengo un libro suyo titulado Annhilated Time. Poetry and other politics. Es probable que el anticapitalismo feminista queer del pensamiento universitario yanqui sea un juego de lenguaje "corporativo" puesto que no se ve a sí mismo envuelto en ninguna lucha política directa ni en ninguna decepción o trampa  o contradicción o ((vaya, que juega en casa siempre, con amigxs)); pero hay veces que parece honesto y responsable; que suena a juego serio dispuesto para quien pueda - fuera de la casita - jugarlo. Para otro día dejo esa discusión, tan necesaria, sobre la (im)posibilidad de pensamiento crítico separado del mundo, encerrado en los campuses de lujo, a pocos metros que son kilómetros reales de calles miserables, de ghettos tristísimos (en philadelphia hay unos cuantos); pero hoy quería postear la emoción de escuchar a gente tan seria y tan lista partir de unos supuestos tan poco esnobs y dogmáticos como los que se suelen asociar falsamente a las neovanguardias poéticas

Christian Bök: Se trata de un genio a la antigua usanza - o casi, creo. Un más que digno sucesor de Alfred Jarry, a quien ha leído muy inteligentimente en unos cuantos libros y artículos. Presentó un proyecto llamado The Xenotexte, que consiste en producir un procedimiento de escritura igual a la bacteria deinoccus radiourans, por el cual de un poema podrían extraerse otros sin necesidad de escribir: el poema se convertiría así en un organismo vivo capaz de sobrevivir a la humanidad. Esto fue argumentado con todo lujo de detalles y rigores científicos posibles, verosímiles; además de con gritos, jaleos, aserciones y demás formas de la ciencia y de la ideología científica. El asunto es extenso y complejo: http://www.law.ed.ac.uk/ahrc/script-ed/vol5-2/editorial.asp; la presentación fue impresionante. Después de Bök  trabajamos a Jarry en el seminario de Bernstein. Quizás cierta propuesta  de fundir ciencia y poesía no es tanto el último grito estilístico del posmodernismo  "postpoético"(mallo); como un viejo proyecto patafísico que consiste en delirar el centro de los lenguajes del orden para instalar allí la imaginación verificable de nuevos mundos por venir: el desorden total es el comienzo


Jordan Scott hizo casi el mejor de los mejores recitales que alguna vez yo viera o vería - el más honesto, el más proporcionado, el menos mágico, el mejor poeta. Scott es tartamudo y sobre esa falta de fluidez verbal construye textos, poética y recital maravillosos. No por la dificultad de su voz es más auténtica su escritura; la voz en este caso no consigue falsas ganancias; el texto va en el cuerpo incorporado. No por observar la superación de una discapacidad fue emocionante su recital; lo fue por el cansancio, el esfuerzo, la tensión, la pausa, la concentración y el conflicto que el ritmo no fluido de su cuerpo proporcionaba. Me recordó a aquel recital de un gran tímido (cuyo nombre no escribo) agresivo y sudoroso y agarrado a una mesa; y aquel de una poeta listísima peleando contra el pudor universal; artes físico-líricas, constataciones en directo de lo indirecto y entrecortado del lenguaje, que no no nos llega claro, ni limpio, ni de una

ny / ...



a veces voy a ny - tardo dos horas en llegar desde philadelphia - son viajes sencillos en autobus a través de un paisaje sin pretensiones - una especie de viaje secreto, sin foto. Me gusta de philly que es el extrarradio de algo más grande respecto de lo que no siente ansiedad. A veces paro en Brooklyn, en casa de A. A veces en casa de G y A en Harlem. Harlem y Queens me parecen, a veces, los únicos barrios reales de ny. He conocido el Saint Nick's, un local de jazz en directo en la 147 - me gusta no por el jazz, que me aburre, sino por la clientela. Entre semana se puede conocer a cualquiera que ande por la barra, te saludan, hacen por que estés a gusto. Las dos veces que he ido ha aparecido un elegante tipo que lucía un bombín blanco; también había parroquianos en chandal. Las luces son ristras de bombillas de colores típicas de navidad; el techo es bajo y de gotelé; a mí me recuerda a una cueva del Sacromonte. Ahí o en otros bares hablamos mucho; para mí ese es un signo de amistad, hablar sin fin, hasta caer dormidxs - también leer y releer los textos de lxs amigxs; será verdad eso de que escribimos en parte para que nos quieran/querer más  (gracias, Syk...)